Desde hace 3 meses, la Línea de la Concordia que divide a Tacna y Arica, es protagonista de una de las mayores crisis migratorias de los últimos años. Pero en los últimos días, con la declaratoria del estado de emergencia por parte gobierno peruano, la situación se sigue agravando, y ya son cientos los migrantes que se agrupan en la zona fronteriza, una situación que ha causado tensión política entre Perú y Chile.
Este ambiente ha provocado acciones violentas por parte de los migrantes que se encuentran desprotegidos y varados en el desierto al intentar cruzar a alguno de los dos países, debido a que en su mayoría los ciudadanos extranjeros no cuentan con la documentación requerida y las fuerzas policiales y militares les impiden el paso.
Las autoridades de ambos países entablaron una mesa de trabajo, en la que, según la Canciller de Perú, Ana Cecilia Gervasi, se han realizado coordinaciones con Venezuela para implementar vuelos de repatriación para los ciudadanos venezolanos que voluntariamente deseen regresar a su país.
Ante ello, diferentes organismos nacionales e internacionales ya se han pronunciado con respecto a la situación de precariedad absoluta en las que se encuentran los migrantes y la desatención por parte de ambos gobiernos, entre estas, la Conferencia Episcopal Peruana emitió un comunicado donde urge a las autoridades realizar los esfuerzos necesarios para solucionar esta crisis y a las fuerzas del orden tratar con humanidad a los ciudadanos extranjeros.
Amnistía Internacional estimó que al menos 300 personas, la mayoría de nacionalidad venezolana y también haitiana, están varadas en la frontera y enfrentan una situación humanitaria crítica, sin alimentos, agua, alojamiento o asistencia sanitaria en el desierto conocido por sus condiciones extremas.
Además, el superintendente nacional de Migraciones, Armando García, precisó que hay un grupo de migrantes en el país que tienen el carné de residencia o extranjería, pero que no ha sido validado en el transcurso de los años, cayendo en la irregularidad. Y se calcula que son, aproximadamente, entre 100,000 y 120,000 personas extranjeras.
Desde MigraSegura, hacemos un llamado a no exponerte a una situación de peligro dirigiéndote al paso fronterizo entre Tacna (Perú) y Arica (Chile) y además que cuentes con una situación migratoria regular para evitar conflictos con las autoridades locales pertinentes.
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