Hay que recordar que las personas mayores también están protegidas contra la violencia, que puede tomar múltiples formas (física, psicológica, institucional, patrimonial), siendo visibles (como muertes y heridas) o invisibles (como las que provocan sufrimiento, desesperanza, depresión o miedo). Si has sido víctima o presenciado alguna forma de violencia contra personas ancianas, puedes denunciar la situación ante las autoridades brasileñas. Esto se puede hacer de dos formas:
- Puedes presentar una denuncia policial en la Comisaría de Policía más cercana de tu domicilio.
- Puedes llamar al número 100 (Audiencia Nacional de Derechos Humanos) para realizar tu denuncia por teléfono.