Riobamba fue sede de la segunda jornada de integración Creciendo Juntos, que tuvo el propósito de brindar asistencia médica, información y orientación sobre acceso a derechos a la población que se encuentra en situación de movilidad humana, así como para las personas ecuatorianas que requirieron de estos servicios.
El evento se desarrolló el domingo 25 de septiembre. Los servicios gratuitos que ofreció la segunda jornada de integración Creciendo Juntos, fueron: medicina general, pediatría, optometría, psicología, odontología y despistaje de diabetes.
La jornada de integración contó con el apoyo de varias organizaciones como:
Cáritas Ecuador, el Centro Amor de la OIM, Cooperación Española, HIAS, Defensoría Pública, Fundación Esquel, Migrante Universal, Asociación Venezuela en Ecuador, Asociación Venezolanos en el Exterior y Word Vision.
Paola Peña, técnica Auxiliar de Plataformas de la Organización Mundial de las Migraciones (OIM), señala que estas ferias son importantes para las personas migrantes que “necesitan adquirir información valiosa y de fuentes oficiales para poder acceder a sus derechos como: salud, educación y exigir que las instituciones cumplan con estos derechos. Consideramos importante y necesario, como su nombre lo dice una jornada de integración entre la población migrante y la población de acogida, donde podamos compartir, conocer culturas, experiencias y tradiciones diferentes”.
Cáritas Ecuador junto con Cáritas Riobamba, estuvieron al frente de la organización del evento de integración. Para el padre Luis Machado, responsable de Cáritas Riobamba, las jornadas intentan “unir a la comunidad extrajera en la ciudad de Riobamba y a la comunidad de acogida. Es una oportunidad para caminar juntos, para ir creciendo en los gozos, en las esperanzas, en el dolor y en la tristeza, pero también es una oportunidad para irnos acompañando, saber que nuestros hermanos venezolanos tienen un lugar de acogida en esta ciudad. La Iglesia se involucra en estos espacios porque nos recuerda que María y José también fueron peregrinos y en este éxodo es una oportunidad para conocer los rostros de hombres y mujeres que les toca caminar en situación de dolor y es ahí donde la Iglesia tiene que estar en constante salida”.
Carlos Sampayo, emprendedor venezolano, manifestó que “las ferias son una oportunidad para seguir creciendo con mi emprendimiento de postres y tortas. Es un espacio inclusivo y necesario para que una sociedad pueda crecer desde sus bases desde el comercio independiente. La atención en pediatría que recibió mi hijo el día de ha sido buena, los doctores calificados y una atención personalizada excelente”.
La jornada de integración tuvo la visita de familias en situación de movilidad humana, así como de población ecuatoriana que accedió a varios servicios que ofreció la feria Creciendo Juntos. Valentina una joven de 15 años que nació en Portoviejo y que actualmente vive en Riobamba, dijo “sentirse cómoda con este evento, el ambiente agradable, la música y la gente muy empática, un ambiente que no suele verse muy a menudo. En la atención de los servicios médicos hay mucha disponibilidad por parte de los profesionales de la salud”.
La feria estuvo animada por diversas actividades como: arte, cultura y música, así como stands de comida de diversos emprendimientos que participaron de la jornada. La próxima jornada Creciendo Juntos, se realizará en Machala, el próximo 2 de octubre.
Según datos de la Evaluación Conjunta de Necesidades, que contó con el apoyo del Grupo de Trabajo para Refugiados y Migrantes GTRM, y que levantó información entre el 19 y 24 de julio en la ciudad de Riobamba, se estima que hay aproximadamente 5.000 personas venezolanas que viven en el cantón. La mayoría de esta población tiene vocación de permanencia y ha logrado un proceso de integración social.
La última jornada se realizará el domingo 2 de octubre en Solanda, al sur de Quito.