Desde el comienzo de la pandemia, en marzo del 2020, Brasil ha mantenido cerradas sus fronteras para migrantes de cualquier nacionalidad, ya sea por medios aéreos, terrestres o acuáticos. De acuerdo con la Ordenanza N.º 625, del 25 de enero de 2021, las siguientes personas pueden ingresar a Brasil:
- Personas brasileñas nativas o naturalizadas.
- Inmigrantes con residencia permanente en territorio brasileño, por período determinado o indeterminado.
- Personas profesionales extranjeras en misión al servicio de un organismo internacional, siempre y cuando cuenten con la identificación respectiva.
- Personas funcionarias extranjeras acreditadas ante el Gobierno brasileño.
- Migrantes cónyuges, compañeros/as, hijo/as, padres/madres de una persona brasileña, cuya entrada esté específicamente autorizada por el gobierno brasileño, por motivo de interés público o por razones humanitarias y siempre que cuente con el Registro Nacional Migratorio.
- Transporte de cargas.
Es importante destacar que hay restricción de entrada en el territorio brasileño para personas venezolanas. Aunque el tráfico entre residentes fronterizos de ciudades-gemelas está permitido mediante la presentación de un documento de residente fronterizo, u otro documento que compruebe esta condición, esta norma no se aplica a la frontera con Venezuela.