En Brasil, el principal instrumento normativo que regula los derechos y deberes es la Constitución Federal. Establece como principios fundamentales la promoción del bien de todos, sin prejuicios ni discriminación alguna, así como la garantía de igualdad para brasileños, solicitantes de refugio, refugiados y migrantes.
La Ley de Migración (Ley N.º 13.445/2017) presenta el rechazo y prevención de la xenofobia, el racismo y cualquier forma de discriminación; la no discriminación e igualdad de trato y oportunidades para los migrantes y sus familias; y el acceso igual y gratuito a los servicios, programas y beneficios sociales, bienes públicos, educación, asistencia jurídica pública integral, trabajo, vivienda, servicios bancarios y seguridad social, como principios, garantías y derechos que rigen la política migratoria brasileña.
Brasil también cuenta con la Ley de Delitos Raciales (Ley No. 7.716/1989), que establece como delito las acciones resultantes de discriminación o prejuicio por motivos de raza, color, etnia, religión u origen nacional. Quien comete este delito practicando, induciendo o incitando a la discriminación o al prejuicio puede responder penalmente.
Se pueden considerar ejemplos de crimen de xenofobia situaciones en que personas te digan frases como:
“Vuelve a tu país” | “Aquí no hay lugar para ti” | “No aceptamos solicitudes de extranjeros” | “Este servicio solo atiende a brasileños” | “Aprende portugués antes de hablar conmigo” | “No hay mesa disponible” | “No alquilo casa a extranjeros”
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